6. El adolescente y sus relaciones.
El período de la adolescencia es una etapa crucial en el desarrollo humano, marcada por cambios importantes y rápidos, tanto físicos como psicológicos. Las relaciones sociales durante esta etapa juegan un papel clave en la formación de la identidad, la autoestima y las habilidades de los adolescentes.
Durante la etapa de la adolescencia las relaciones de los jóvenes experimentan cambios importantes entre los que podemos destacar:
- Cambios en las relaciones familiares. Los adolescentes comienzan a buscar mayor independencia y autonomía de sus padres y empiezan a formar sus propios puntos de vista, que pueden ser diferentes de los de sus familias.
Los padres pueden tener que adaptarse y ser más una guía y apoyo, en lugar del control y dirección al que estaban acostumbrados con niños pequeños. Sin embargo, aunque haya más independencia, el apoyo de la familia sigue siendo muy importante.
- Importancia de las relaciones con amigos y compañeros. Los amigos y compañeros de la misma edad asumen una importancia creciente. Los adolescentes suelen pasar más tiempo con sus amigos y menos con su familia. Las amistades permiten descubrir nuevas ideas, intereses, etc.
Los adolescentes comienzan a depender más de sus amigos para formar su autoestima. Estas relaciones también son cruciales para el desarrollo de habilidades sociales, como la negociación, la empatía y la resolución de conflictos.
Hay que tener en cuenta que los adolescentes suelen ser muy influenciados por sus compañeros. Las amistades pueden afectar comportamientos, elecciones de estilo de vida y decisiones. En esta etapa, la presión de grupo puede ser fuerte.
- Inicio de relaciones románticas y sexualidad. Muchos adolescentes comienzan relaciones románticas. Estas relaciones son muy importantes para aprender de las propias emociones, pero también pueden suponer desafíos y confusiones. Aprender a manejar los aspectos emocionales y físicos de las relaciones románticas es una parte importante del desarrollo durante la adolescencia.
- Influencia de las redes sociales y la tecnología en las relaciones. La tecnología y las redes sociales han transformado la forma en que los adolescentes se comunican y establecen relaciones. Estas herramientas pueden facilitar la conexión y el apoyo entre amigos, pero también pueden crear problemas, como el ciberacoso, la presión por la comparación social y la sobreexposición. De hecho, desde que los adolescentes tienen acceso a redes sociales en el móvil, la cantidad de ellos que sufren depresión ha ido en aumento. Aquí puedes ver un enlace de la OMS.
• Asunción progresiva de responsabilidades.
En el año 2000 estaba deseando empezar la universidad. Recuerdo las ganas que tenía de empezar a salir los jueves, día en el que reunían todos los universitarios. Pero había dos problemas: el primero, que para poder salir de manera regular necesitaba dinero, y el segundo, que los viernes las clases empezaban a las 8:30 de la mañana.
Mis padres me dijeron que no había problema (todavía vivía con ellos), pero que debía asumir mis responsabilidades. Podría salir todos los jueves siempre y cuando el viernes fuera a clase. Además, me puse a entrenar baloncesto a niños pequeños con los que obtener un dinerillo. Y así, empecé a organizar mis gastos para poder salir jueves, viernes y sábado (una vida ociosa intensa la de Albacete). Por supuesto, todos los viernes por la mañana estaba en esa clase de Microeconomía que nunca olvidaré, más que nada, porque iba sin apenas dormir a clase. Pero iba, vaya que si iba. A eso se le llama apechugar.
A medida que los adolescentes van creciendo, comienzan a asumir responsabilidades más adultas. Este proceso es clave para su desarrollo y transición hacia la vida adulta. Algunas de las responsabilidades que empiezan a sentir los adolescentes son:
- Responsabilidades personales. Incluyen cuidar de tu higiene personal, manejar tu tiempo y dinero, y tomar decisiones sobre tu educación y carrera.
- Preparación para el futuro. Parte de la asunción de responsabilidades implica planificar y prepararse para el futuro. Esto puede incluir decisiones sobre estudiar en la universidad, la formación profesional o empezar a trabajar.
- Responsabilidades en casa. A medida que creces debes contribuir más en casa, lo que puede incluir tareas como cocinar, limpiar, y cuidar de hermanos menores. ¿Quieres que traten como un adulto no? Eso incluye unos derechos, sí, pero también obligaciones.
- Tomar la responsabilidad de tus decisiones. Otro paso importante es que debes comenzar a aceptar las consecuencias de tus actos. No has estudiado para el examen y has suspendido, has faltado el respeto a un profesor o compañero y te han sancionado. No has prestado atención en clase y no comprendes como hacer la tarea. Deja de buscar culpables. La culpa no es del profesor por suspenderte ni de los motivos que te hayan impedido estudiar. La culpa no es de tu compañero por provocarte o por despistarte en la clase. La culpa es tuya, que siempre puedes organizar tu tiempo mejor, puedes no entrar en provocaciones o decir a tu compañero que no te moleste. A eso se le llama apechugar.
• Conductas prosociales y antisociales.
Cuando iba al instituto con vuestra edad me tocó una clase con muy malos estudiantes. Mi amigo Chema y yo éramos de los pocos que aprobábamos todas, especialmente Chema que era alumno de sobresaliente. Recuerdo que en la primera evaluación todos los demás chicos suspendieron 5 o 6 materias y estaban presumiendo a ver quién suspendía más - ¿Se puede ser más tonto? – Complicado.
Estos chicos eran especialmente duros con Chema del que se reían porque sacaba muy buenas notas – Pues sí, confirmado que se puede ser más tonto – Muchas veces como adolescentes no nos damos cuenta de que lo que hacemos o decimos puede influir en otros. Por eso, es importante que diferencies entre conductas prosociales y antisociales.
Durante la adolescencia, los jóvenes debéis tomar decisiones que pueden influir en vuestro propio bienestar y en el de las personas que os rodean. Es importante que los adolescentes comprendan la diferencia entre conductas prosociales y antisociales, y cómo estas afectan a la sociedad.
- Conductas Prosociales. Son acciones que benefician a otros y contribuyen al bienestar de la sociedad en general. Ejemplos de conductas prosociales incluyen: ayudar a un amigo en dificultades, ser empático y considerado, y respetar las normas sociales.
- Conductas Antisociales. Son acciones que perjudican a otros o que van en contra de las normas y valores de la sociedad. Esto puede incluir el comportamiento agresivo, el acoso a compañeros (bullying), el vandalismo y el incumplimiento de leyes y reglas.
Normas sociales, roles de género y estereotipos: su impacto en el comportamiento adolescente.
Las normas sociales, los roles de género y los estereotipos desempeñan un papel importante en la formación del comportamiento adolescente.
Normas sociales. Son reglas no escritas que guían el comportamiento en la sociedad. Por ejemplo, cómo se espera que los adolescentes se comporten en la escuela, en casa o en sus relaciones sociales. Los adolescentes se enfrentan a la presión de conformarse a estas normas, lo que puede influir en sus elecciones y acciones. Por ejemplo, los adolescentes pueden sentirse presionados para iniciar su vida sexual debido a la idea de que "todos lo están haciendo". Otro ejemplo es el uso de las redes sociales, donde la necesidad de obtener "likes" y aprobación de los demás puede influir en las decisiones que se toman o en cómo los adolescentes ven su cuerpo.
· Impacto de las normas. Las normas sociales pueden influir en todo, desde la forma de vestir de los adolescentes hasta sus intereses y comportamientos. Es importante que los adolescentes aprendáis a cuestionar las normas injustas o perjudiciales, así como las que no se ajustan a vuestros intereses.
Roles de género. Son las expectativas sociales sobre cómo deben comportarse los individuos según su género. Esto incluye ideas sobre cómo deben actuar, vestirse y expresarse los chicos y las chicas. También puede influir en la elección de aficiones o actividades. Por ejemplo, las chicas pueden enfrentar críticas por vestir de manera "demasiado masculina" o "demasiado provocativa", mientras que los chicos pueden recibir burlas si su apariencia no es lo que se considera tradicionalmente masculino.
· Impacto de los roles de género. La conformidad con estos roles puede limitar la expresión personal y el desarrollo, mientras que desafiarlos puede llevar a conflicto o rechazo social. Es esencial defender la igualdad de género y desafiar los roles de género que puedan limitar las opciones y oportunidades.
Estereotipos. Los estereotipos son creencias simplificadas y a menudo incorrectas sobre un grupo de personas. Por ejemplo, aquellos adolescentes que están interesados por obtener notas altas se les etiqueta de “empollones” y automáticamente se les considera como poco interesantes. Todo lo contrario de aquellos a los que le gusta “salir de fiesta”, que se les considera “populares”.
Por cierto, mi amigo Chema era considerado como un empollón y era marginado por muchos compañeros de clase. Como burla, Chema me decía que todos los “populares” acabarían limpiándole los zapatos cuando no encontraran ningún trabajo. Hoy Chema es un importante empresario con varios cientos de empleados. Se limpia los zapatos él solo, pero como ves, muy a menudo los “populares” acaban trabajando de adultos para los “empollones”. Ten cuidado la próxima vez que te rías de un empollón, lo mismo acabas pidiéndole trabajo.
· Impacto de los estereotipos. Los adolescentes debéis ser conscientes de cómo los estereotipos pueden influir en como vemos y nos comportamos con los demás, y cómo pueden contribuir a la discriminación y el prejuicio.
A menudo, hay una presión para conformarse con estos normas, roles y estereotipos lo que puede llevar a los adolescentes a actuar de ciertas maneras para ser aceptados o para cumplir con las expectativas de otros.