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10. Técnicas de estudio para memorizar.


Ya hemos dejado claro que cuando estudiamos necesitamos comprender la información primero, ya que de lo contrario nos costará mucho trabajo.  Sin embargo, aunque que comprendamos algo, un mínimo de memorización siempre es necesaria.

Las TÉCNICAS DE ESTUDIO de memorización son aquellas que nos ayudan a recordar la información cuando sea necesario.

 

La memorización es como guardar tus avances en un juego. No quieres perder lo que ya has logrado, ¿verdad? Estas técnicas te ayudarán a "guardar" la información en tu memoria:

Reglas mnemotécnicas.

Son trucos para hacer que la información sea más fácil de recordar. Por ejemplo, crear acrónimos (palabras formadas por las iniciales de una lista de palabras) rimas, historias o frases que te ayuden a recordar listas o conceptos.

Son especialmente útiles para recordar listas o palabras concretas. Por ejemplo, la primera letra de cada una de las 8 técnicas de memorización de este apartado son RFSMEART. Podría hacer una frase que fuera "Rápidamente, Francisco Salió a Mostrar Estrategias Aprendidas, Repitiendo Temas"”.

Flashcards (tarjetas de estudio).

Son tarjetas que contienen preguntas en un lado y respuestas en el otro, para repasar y memorizar información clave. Otra opción es escribir un concepto o una fórmula matemática en una cara de la ficha; y en el otro la definición del concepto o la demostración de la fórmula matemática. Se examina uno así mismo viendo la ficha y tratando de recordar los detalles de la otra cara.

Son excelentes para memorizar definiciones, fechas o fórmulas. Además, te permiten hacer un juego de ello. Puedes jugar a ver cuántas flashcards aciertas y tratar de batirte a ti mismo la próxima vez.

Simulacros de pruebas y tipo test.

Simular exámenes reales puede ayudarte a familiarizarte con el formato y a reducir la ansiedad. Si hemos simulado el examen, y hemos practicado mucho, esto nos ayudará a reducir la ansiedad. La simulación dependerá del tipo de examen.

- Si son preguntas teóricas, podemos formular posibles preguntas que podrían surgir y practicar cómo responderíamos. Es importante que, si el examen es escrito, que la respuesta la hagamos escrita para ensayar.

- Sin son pruebas o ejercicios prácticos, debemos ensayar el tipo de problemas que suelen preguntar. Si los has practicado muchas veces será más fácil recordar cómo hacerlo.

- Si son tipo test, debemos tratar de buscar preguntas de este tipo (en internet seguro que hay) para familiarizarnos con el sistema. 

amigos leyendo un libro en medio del examen. estudiando para el examen  8578083 Vector en Vecteezy

Método Feynman (enseñar a otros).

Consiste en enseñar a otros los conocimientos que hemos estudiado. Esta explicación debemos hacerlo con nuestras propias palabras, como si estuvieras enseñándolo a alguien que no tiene ni idea.

Ilustración plana de amigos del grupo de estudio | Vector PremiumExplicar el material a alguien más es una forma poderosa de reforzar lo aprendido, ya que requiere que organices tus pensamientos y entiendas el contenido lo suficientemente bien como para explicarlo claramente.

Estudio en grupo. 

Estudiar con otros permite discutir y explicar los conceptos a compañeros, lo cual puede servir para resolver dudas y reforzar lo aprendido. Es importante que el grupo desee ser productivo.

Aprendizaje distribuido.

Consiste en distribuir nuestros días estudio sobre un tema en sesiones cortas y en varios días diferentes, en lugar de hacer una maratón de estudio un solo día. Esta técnica ha es mucho más efectiva para recordar la información que un estudio muy intenso de última hora.

Repetición espaciada.

La repetición espaciada es una técnica que implica repasar el contenido de estudio cada cierto tiempo, de manera que el tiempo que dejamos pasar entre repaso y repaso es cada vez mayor. Es ideal cuando tenemos que retener mucha cantidad información para una o varias pruebas. 

Esta repetición espaciada parte de la curva del olvido, que indica que nuestro cerebro pierde la información de manera muy rápida en los primeros días. Sin embargo, a medida que vamos haciendo repasos, la cantidad de información que olvidamos con el paso de los días es menor. Eso quiere decir, que cada vez podemos dejar más tiempo entre repaso y repaso y que cada vez recordamos más información.

TÉCNICA EPL2R (explorar, preguntar, leer, recitar, repasar).

Ya te he contado que en el instituto era un alumno promedio. El día que lo cambió todo fue una clase de lengua del último año, cuando solo 3 personas aprobaron el primer trimestre. La profesora estaba extrañada puesto que consideraba que el examen no había sido difícil, a lo que le comentamos que había mucho contenido (típica excusa de alumno). En ese momento, nos comentó que nuestro problema era que tratamos de memorizar todo y que no estábamos comprendiendo lo que estudiábamos. Primero debíamos comprender y luego usar alguna técnica de memorización.

Nos tuvo toda la hora ensayando una técnica de estudio que combinaba estrategias para comprender la información con otras que ayudaban a la memorización. Esa técnica cambió mi vida y es la que llevé a cabo durante el resto del curso y durante toda la universidad, y que me llevó de ser un alumno del montón a uno muy bueno. La técnica es la que te voy a explicar a continuación.

 

La técnica EPL2R es una técnica que nos puede ayudar tanto a comprender la información como luego a memorizarla. La sigla EPL2R representa las etapas del proceso de aprendizaje que involucra: Explorar, Preguntar, Leer, Recitar y Repasar.

 

EXPLORAR (E).

Antes de comenzar a leer, debemos echar un rápido vistazo general al material de estudio. El objetivo es obtener una visión global del contenido, identificando títulos, subtítulos, gráficos, resúmenes o cualquier elemento destacado que pueda dar una idea general del tema a tratar. Piensa que tal vez el autor del libro o texto nos quiere llamar la atención con algunos de estos aspectos por ser más importantes.

PREGUNTAR (P).

Tras tener una visión general, el siguiente paso es hacernos preguntas sobre el contenido que vamos a estudiar. Estas preguntas pueden surgir de los títulos, subtítulos o cualquier aspecto que haya llamado la atención durante la fase de exploración. Convertir los títulos de los apartados en preguntas puede ser una estrategia útil. Este proceso activa la curiosidad y prepara la mente para buscar respuestas, aumentando así la concentración.

También debemos tratar de recordar las explicaciones de nuestro profesor.

LEER (L).

Ahora, debemos realizar una lectura de forma más detallada, buscando responder a las preguntas formuladas en el paso anterior. La lectura debe ser activa y centrada, con el objetivo de comprender y absorber la información. Es importante subrayar, hacer anotaciones o incluso poner marcas para los conceptos más importantes (una exclamación, una estrella etc.). De esa manera estamos personalizando el texto.

   

Debemos prestar atención a aquellos aspectos que han sido resaltados dentro del texto, es decir, si tenemos subrayado, negrita, cuadros, gráficas etc. En el caso de que haya introducciones, conclusiones o resúmenes, debes leerlos, porque en ocasiones se incluyen importantes aclaraciones que te pueden ayudar a entender mejor la información.

RECITAR (R).

Después de leer, el siguiente paso es recitar la información en voz alta sin mirar las notas o el texto. Esto puede implicar responder a las preguntas formuladas anteriormente, resumir lo estudiado o explicar conceptos clave con tus propias palabras. Recitar ayuda a consolidar lo aprendido y a identificar aquello que debo repasar de nuevo.

Recuerda que es importante utilizar tus propias palabras, porque repetir algo de memoria palabra por palabra hará que sea mucho más difícil recordar la información. Es posible que necesitemos varias lecturas para poder recitar todo lo aprendido.

Algunos consejos que puedes seguir:

- No intentes recitar todo, una vez que has hecho una primera lectura. Divide cada apartado en varias secciones, lee de nuevo la primera sección e intenta recitarla. No pases a la siguiente sección hasta que no la domines. 

- Una vez que has recitado en voz alta todas las secciones de un apartado, trata de recitar todas las secciones a la vez. 

- Cambia la entonación de la voz dependiendo lo que estés recitando. Trata de enfatizar cuando llegues a una parte importante. También puedes gesticular y utilizar las manos como hacen las personas cuando hablan en público.

REPASAR (R).

Finalmente, el repaso consiste en revisar el material de estudio. Esta etapa puede incluir volver a leer el texto, las anotaciones que hemos ido haciendo o discutir el material con otros. El repaso es crucial para mantenerlos en la memoria y asegurar que comprendemos el tema.

Podemos diferenciar varios tipos de repaso:

- Repaso inmediato.  Al final de la sesión de estudio debemos hacer un repaso completo. Esto debe incluir recitar en voz alta todo lo que hemos estudiado.

  • Repaso intermedio. Si tenemos mucho contenido, deberemos hacer algún repaso más al pasar los días.  Podemos usar la técnica de la repetición espaciada, y hacer un repaso a los al día siguiente, luego otro a los 3 días, otro a la semana etc.
  • Si el contenido es realmente extenso, puedes dedicar algún día solo a hacer repasos.
  • Repaso final. Antes del examen debemos dar un último repaso final para garantizar que hemos aprendido el contenido.
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