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9.2. ¿Cómo es un consumidor responsable?


El consumo responsable es una actitud y una forma de vivir. Un consumidor responsable cumple principalmente dos características: compra productos de manera responsable y tiene unos hábitos de vida responsables.

1. Compra productos de manera responsable. Implica consumir menos y elegir productos respetuosos con el medioambiente.

- Consumir menos. Consumir de manera responsable significa cuestionarse a la hora de comprar qué es prescindible y qué no. ¿De verdad necesito otra camiseta? ¿y esa cantidad de comida? 

 - Elegir productos respetuosos con el medio ambiente. Un consumidor responsable tiene en cuenta el impacto ambiental del producto a comprar. Hay que tener en cuenta la producción, el transporte y la distribución ¿La manera en la que se ha producido es contaminante? ¿usa muchos plásticos? ¿El producto viene de muy lejos, de manera que ha sido necesaria mucha energía para transportarlo? ¿genera residuos?

2. Tiene hábitos de vida responsables dentro y fuera del hogar. Además, el consumo responsable es una actitud que también se puede ejercer dentro y fuera del hogar y en los hábitos de vida. Gestos sencillos como ahorrar electricidad, calefacción, agua o combustible, hacen que mejore la calidad de vida de todos los demás.

• Consejos para llevar consumo responsable

La cosa se está poniendo bastante malita con el tema del medioambiente. Ya sé que a veces parece imposible que las personas normales podamos salvar el mundo. Pero, ¿qué hacemos? ¿Nos quedamos de brazos cruzados?

Algunos consejos que podemos seguir para un consumo responsable son:

Reduce el uso de recursos.  

Para ello, podemos hacer uso de la regla de las 3 R: reducir, reutilizar y reciclar.

1. Reducir implica que preguntarse cada vez que vas a comprar algo si de verdad lo necesitas o si solo te estás guiando por la moda, la publicidad o un impulso. También evitar productos con exceso de embalaje o envoltorios, así como no usar tantos plásticos. 

2. Reutilizar significa volver a usar los productos antes de tirarlos. Podemos reparar los productos en lugar de comprar otro nuevo o cuidarlos mejor para que duren más. 

3. Reciclar se refiere a la transformación de los materiales que ya hayan sido utilizados en nuevos productos. Es importante que recordemos que para poder llevar a cabo un adecuado reciclaje se debe separar cada material en casa o en el instituto.

 

1. HAZ UN BUEN USO DEL AGUA

  1. - Ahorra gastos innecesarios con gestos sencillos como poner el lavavajillas o la lavadora solo cuando están llenos. 
  2. - Cierra el grifo mientras te lavas los dientes, se afeita o friega los platos.
  3. -  Date duchas cortas. Una ducha de 5 minutos es suficiente.

 

2. AHORRAR ENERGÍA

  1. - Apaga las luces y aparatos eléctricos que no se estén utilizando. 
  2. - Utiliza bombillas de bajo consumo y aprovecha todas las horas de luz natural. 
  3. - Revisa los cierres de puertas y ventanas para conservar el calor.
  4. - Camina en lugar de pedir que te lleven en coche, utiliza la bicicleta o transportes público

 

3. NO DESPERDICIES COMIDA 

  1. -Planifica las comidas para evitar comprar de más y ve al supermercado con una lista de la compra.
  2. - Acude más veces a comprar para evitar compras muy grandes que puedan hacer que los productos se pongan malos.
  3. - Lee las etiquetas de los productos para comprobar la fecha de caducidad.
  4. - Compra productos frescos de temporada ya que necesitan menos refrigeración y por tanto menos energía, menos plásticos etc.
  5. - Conserva los productos de manera adecuada

 

4. HAZ COMPRAS RESPONSABLES

1. -Compra productos en comercios locales, ya que estos tienen menos necesidad de transporte y así se reduce la contaminación. 

2. - Evita los productos con un embalaje o plásticos excesivos. Lleva tus propias bolsas.

3. - Evita los productos desechables de usar y tirar (de uno o pocos usos).

 

 

5. INFÓRMATE

Si te decides a comprar algo, averigua de qué materia prima se fabrica, de qué manera su proceso de manufacturación impacta al medio ambiente y si genera algún daño o injusticia social (la industria textil es hoy el segundo mayor contaminador de agua potable después de la agricultura). Si hacemos nuestras compras a proveedores locales y sostenibles, podemos marcar la diferencia y ejercer presión sobre las empresas para que adopten prácticas sostenibles).

 

El cambio empieza por nosotros mismos. “Sé el cambio que quieras ver en el mundo”. 





 

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