ACTIVIDAD. LA TASA ROSA
A continuación vamos a leer el siguiente artículo de Nahiara S. Alonso
¿Qué es la Tasa Rosa?
Al IVA del 10% de los productos de higiene femenina: compresas, tampones, copa menstrual… que no están considerados como de «priamera necesidad» (que la Agencia Tributaria publica en el listado de los tipos impositivos), se suma la Tasa Rosa. Este impuesto es cómo se conoce al sobreprecio que pagan las mujeres por hacerse con productos y servicios que cuestan menos en su versión masculina. Uno de los ejemplos más famosos es el de las cuchillas de afeitar destinadas para hombres y para mujeres como denunciaron organismos como Facua.
«No es ningún tipo de impuesto, ni nada similar, sino que productos
equivalentes, cuando no idénticos, son más caros cuando son para mujeres: un
desodorante o perfume de la misma marca y formato, más caro si es para mujer
que si es para hombre», publican por su parte en la Organización de Consumidores y
Usuarios (OCU).
¿Cuál es la situación en
España?
En España la Tasa Rosa se aplica en todos los territorios menos en
Canarias, que en 2018 suprimió el Impuesto General Indirecto Canario
(IGIC) -impuesto con el que en Canarias se grava el consumo-, sobre
los principales productos de higiene femenina básica. Así, el archipiélago se
convirtió así en el primer territorio europeo y el segundo en el mundo —
después de Canadá— en tomar esa medida.
La Tasa Rosa y el IVA del 10% en los productos femeninos ha llevado a los
colectivos a pedir que reduzcan las diferencias de precio y los tipos
impositivos, como una petición de Change.org impulsada por la periodista
Celia Blanco que consiguió 137.885 firmas. «Esta tasa significa una
segregación social. Yo ahora pago un impuesto determinado por ser mujer por
algo a lo que no puedo escapar», explica a Newtral.es Celia Blanco.
Blanco considera que eliminar la Tasa Rosa «es indispensable». «Por tener
la regla no debería de tener que pagar más, yo no he decidido ser mujer», alega
Blanco. Además, defiende que «tenemos un compromiso social como ciudadanos». «Necesitamos
un compromiso de los Gobiernos para no sentirnos en detrimento
respecto a los hombres y eso solo ocurrirá cuando por ley se nos proteja»,
sentencia.
¿Y en Europa?
En Europa esta tasa sigue existiendo. El caso de reducción más reciente
es el de Alemania, que a principios de noviembre Alemania aprobó bajar la tasa a los tampones y dejar de
considerarlos como productos «de lujo». Con este cambio, el país germano
reducirá a partir de 2020 el tipo impositivo del 19%, al que tasan estos
productos, al 7%, lo que lo equipara a los productos considerados de
primera necesidad.
Otros países como Irlanda no tienen impuestos sobreproductos como
tampones y compresas, según se recoge la Comisión Europea en el Informe de «Impuestos del IVA aplicados en los distintos estados miembros
de la Unión Europea» y hay países como Reino Unido que la tienen al 5%. En
cuanto al resto de países en Europa, en 2018 el Parlamento Europeo redactó un
informe «Sobre igualdad de género y políticas fiscales en la UE» en
el que pedía a todos los estados miembros que «eliminen el
denominado impuesto sobre el cuidado y el tampón».
«El Parlamento Europeo considera que la pobreza de la menstruación es
un problema continuo en la UE«, explica el texto que pone como ejemplo la
situación de Reino Unido, donde el Plan International estima que 1 de cada 10
niñas no puede pagar productos sanitarios». Así, el Parlamento «lamenta» que
los productos higiénicos femeninos «aún no se consideren productos básicos en
todos los Estados miembros». Estas tasas van hasta el 27% de Hungría, el país
que más alto tiene este impuesto, pasando por el 25% de Dinamarca y Croacia, entre
otros.
PREGUNTAS.
A) ¿Crees que estos productos de higiene femenina deberían ser consideradas bienes de primera necesidad?
B) ¿Qué productos de higiene femenina son más caros que su equivalente masculino? (además de las cuchillas de afeitar que cita el artículo?
C) DEBATE: ¿SE DEBERÍA QUITAR EL 100% DE LOS IMPUESTOS DE LOS PRODUCTOS DE HIGIENE RELACIONADOS CON LA MENSTRUACIÓN?