6. Consecuencias del crecimiento económico en el medioambiente
Aunque algunos países del sudeste asiático han crecido mucho, si vas a
ciudades como Bangkok (Tailandia) verás
que la contaminación es escandalosa.
Esto sin duda que causa graves problemas a la ciudad y a sus habitantes. De
hecho, muchos de ellos van con la boca tapada.
La conexión entre la actividad económica y medioambiente es innegable.
Las empresas necesitan una gran cantidad de recursos que nos proporciona
nuestro entorno y, a su vez, los bienes producidos provocan efectos en el medio
natural. Vamos a verlo.
Las funciones
económicas del medioambiente
El medioambiente cumple principalmente tres funciones económicas:
1. Proveedor de recursos. El
medioambiente nos proporciona una gran cantidad de materias primas
imprescindibles para la producción (minerales, madera, energía etc.) y para el
consumo directo de los seres humanos (alimentos o agua)
2. Receptor de residuos. El
medioambiente puede absorber gran cantidad de residuos que genera la producción
y el consumo, pero hasta un cierto límite. Así, el mar, los ríos, el suelo o el
aire pueden absorber una cierta cantidad, pero al sobrepasar ese límite aparece
la contaminación.
3. Suministrador de servicios a
la sociedad. El medioambiente nos da una gran cantidad de servicios. Nos
permite hacer investigaciones que han supuesto avances para la humanidad.
También es un gran atractivo turístico, ya que todos disfrutamos de los
maravillosos paisajes que podemos encontrar por todo el planeta.
Los principales
problemas ambientales
Hemos visto lo importantes que son estas 3 funciones para la actividad
económica. Sin embargo, cuando se produce un abuso de estas funciones llegan
los problemas ambientales. Estos son los más importantes:
- El efecto invernadero y
cambio climático. Consiste en el
calentamiento de la Tierra debido a la concentración de gases contaminantes.
Estos gases se producen por la quema de carbón y petróleo principalmente, que
provocan lo que se conoce como efecto invernadero.
Al acumularse los gases, parte de la energía del sol vuelven a la
Tierra, porque estos gases impiden que se vayan al espacio. El resultado es el aumento de la temperatura, lo que perjudica
a la agricultura, la ganadería, el agua y supone riesgos de inundaciones al elevarse el nivel de mar, además de
provocar desertización.
- La reducción de la capa de
ozono. La emisión de algunos gases también ha provocado el deterioro de la
capa de ozono, lo que hace que los rayos
solares penetren más fácilmente en la atmósfera. Estos rayos tienen efectos muy perjudiciales para los seres humanos, las
plantas y muchos seres acuáticos.
- La contaminación. Se
produce siempre que el medioambiente no es capaz de absorber todos los residuos
que generan los seres humanos, lo que provoca
daños en el agua, el aire o la tierra. Sus efectos son enfermedades, muertes y
desequilibrios en muchos ecosistemas.
- Pérdida de diversidad
biológica. Ha aparecido debido a pesca y caza indiscriminada, el uso de
químicos en la agricultura y la sobreexplotación de bosques. En las últimas
décadas se ha producido la extinción de muchas especies animales y vegetales lo
puede provocar efectos negativos
incalculables, ya que la diversidad es vital para la alimentación y las
medicinas.
- El agotamiento de recursos
naturales. El alto nivel de consumo que llevan las sociedades modernas está
reduciendo las reservas de recursos del planeta. De seguir a este ritmo, pronto
tendremos problemas con las materias
primas más básicas, tanto las renovables (como la madera) como las no
renovables.
Generación de residuos. La
gran cantidad de residuos que provocamos en la producción y el consumo están
creando auténticos vertederos en el planeta. Nuestros mares y muchos
territorios se están llenando de basura, lo que acaba por provocar daños para la salud de los seres humanos.
La
huella ecológica
La huella ecológica nos
mide el impacto de las actividades humanas sobre la naturaleza, que
se refleja en la superficie necesaria para
producir los recursos y absorber los efectos de dicha actividad.
Según los últimos estudios,
necesitaríamos 1,75 planetas para poder llevar a cabo todas las actividades.
¿Qué significa esto? Que estamos consumiendo más recursos de los que el planeta
es capaz de generar. Más que preocupante sin duda.