3. ¿Qué son las habilidades emocionales?
En los últimos años empieza a haber un mayor acuerdo de que la inteligencia emocional es esencial para afrontar todas las situaciones de la vida, tanto en el trabajo como en lo personal. Así, en el mercado laboral cada vez se valoran más las habilidades que permiten comprender las emociones de compañeros de trabajo, clientes o jefes.
Para poder tener inteligencia emocional es necesario desarrollar una serie de habilidades. Así, algunos autores consideran que la inteligencia emocional se puede dividir en 5 grupos de habilidades emocionales.
1. Conocer tus propias emociones (autoconocimiento). El conocimiento de las propias emociones, es decir, la capacidad de reconocer un sentimiento en el mismo momento en que aparece, constituye la piedra angular de la inteligencia emocional. Esto es porque la incapacidad de percibir nuestros verdaderos sentimientos nos deja completamente a su merced. Las personas que detectan sus emociones suelen dirigir mejor sus vidas, ya que tienen un conocimiento seguro de cuáles son sus sentimientos reales, por ejemplo, a la hora de decidir con quién casarse o qué profesión elegir.
2. La capacidad de controlar las emociones (autocontrol). La conciencia de uno mismo es una habilidad básica que nos permite controlar nuestros sentimientos y adaptarlos al momento. Alguien que controla las emociones tiene capacidad de tranquilizarse a uno mismo, de hacer desaparecer la ansiedad, la tristeza o los enfados exagerados. Las personas que carecen de esta habilidad tienen que luchar constantemente con las tensiones desagradables mientras que, por el contrario, quienes destacan en esta capacidad se recuperan mucho más rápidamente de los contratiempos de la vida.
3. La capacidad de motivarse uno mismo. No basta con conocer y controlar las emociones, sino que hay que saber dirigirlas hacia nuestros objetivos. La capacidad de motivarse a uno mismo, de ser capaces de renunciar a placeres inmediatos es una de las claves todo logro. Las personas que tienen esta habilidad suelen ser más productivas y eficaces en todos los objetivos que se proponen.
4. El reconocimiento de las emociones de los demás (empatía emocional). La empatía, es la habilidad social fundamental. Las personas empáticas reconocen y comprenden las emociones y las necesidades de los demás y esta capacidad las hace más adecuadas para profesiones en donde hay que estar en contacto con otras personas o donde hay que dirigir grupos y equipos de trabajo.
5. El manejo de las relaciones interpersonales (habilidades emocionales interpersonales). La habilidad de saber tratar las emociones de los demás es la clave para las relaciones interpersonales. Las personas que sobresalen en este tipo de habilidades suelen ser personas que todo el mundo quiere a su lado y que tienen éxito en todas las actividades que requieren relaciones entre personas.
No todas las personas tienen igual de desarrolladas estas habilidades. Hay quienes son muy buenos controlando sus propias emociones, pero en cambio, no son especialmente hábiles a la hora de tratar con las emociones de los demás.
