7.1. LA RESPONSABILIDAD SOCIAL CORPORATIVA
Vídeo explicativo. La Responsabilidad Social Corporativa (RSC)
Pero la responsabilidad de las empresas no acaba aquí. Debemos cerrar el tema con el balance social y la ética en los negocios.
En 2015 se destapó el
escándalo del fabricante alemán de automóviles, Volkswagen, que había
dotado a casi 11 millones de sus coches de un sistema para engañar a las
pruebas de emisión de gases contaminantes. Un estudió consideró que “las
emisiones excesivas de los Volkswagen vendidos en Alemania provocarán unas
1.200 muertes prematuras en Europa, lo que corresponde a 13.000 años de vida
perdidos y 1.900 millones de euros en costes”. ¿Es esto responsabilidad social?
Al igual que el entorno tiene una
influencia decisiva en el éxito de una empresa, no podemos olvidar que la
empresa también influye en el entorno en el que habita.
Por supuesto, las empresas tienen muchos efectos positivos en la sociedad. Las empresas crean puestos de
trabajo y generan riqueza. Además, muchos de los grandes avances de la
humanidad han sido gracias a las empresas. Sin embargo, en ocasiones las
empresas también son responsables de grades problemas sociales, como contaminación, agotamiento de los recursos
naturales, abusos laborales etc.
El problema, es que cuando la empresa provoca estos efectos negativos,
está imponiendo una serie de costes sociales. Por ejemplo, una fábrica muy contaminante produce polución en el aire,
lo que no sólo puede llevar a una sensación desagradable que disminuye la
calidad de vida de los ciudadanos, sino que puede llegar a desarrollar
enfermedades mortales.
Los costes sociales son aquellos provocados por las empresas, pero
soportados por toda la sociedad sin que las primeras paguen por ellos. Estos costes sociales también se llaman externalidades negativas.
En la actualidad, cada vez hay
concienciación de los efectos que las acciones de la empresa pueden tener en la
sociedad en general y la necesidad de que estas adopten una actitud más ética y
una responsabilidad social en sus actuaciones.
A partir de aquí surgen dos conceptos
importantes que es necesario destacar: la Responsabilidad Social Corporativa y
la ética en los negocios.
Responsabilidad social corporativa
La responsabilidad social corporativa (RSC) es el comportamiento
voluntario de las empresas, dirigido a que sus actuaciones tengan repercusiones
positivas en la sociedad.
Por supuesto, la empresa debe
cumplir todas las leyes del Estado. Antiguamente, se consideraba que esto era
suficiente para tener una responsabilidad social, hoy en día, sin embargo, se
considera que la RSC va mucho más allá de sólo cumplir la ley.
Los ámbitos de la RSC
Así, la RSC tiene principalmente
3 ámbitos
- Responsabilidad económica. La generación de riqueza, de puestos
de trabajo, y el pago de impuestos son varias de las principales
responsabilidades de la empresa con la sociedad. Las empresas responsables
contribuyen al desarrollo económico de su entorno.
- Responsabilidad social. La empresa debe incorporar todas las
preocupaciones de la sociedad y mejorar las relaciones con los grupos
implicados en su actividad: trabajadores, consumidores, proveedores o el
Estado. Las empresas responsables tienen a sus trabajadores en condiciones
dignas, informan a sus consumidores, respetan los acuerdos con los proveedores,
las leyes del Estado etc.
- Responsabilidad medioambiental. El deterioro del medioambiente ha
sido alarmante en los últimos 50 años. Las empresas responsables intentar
reducir el impacto en el medioambiente no contaminando, consumiendo menos
energía, haciendo un tratamiento adecuado de los residuos, creando envases ecológicos
etc.
La RSC como herramienta competitiva
Ante esta situación, muchas
empresas se han dado cuenta de que los consumidores y la sociedad, cada vez
empieza a valorar más a las empresas que tienen esta RSC. Por ello, muchas
empresas empiezan a adoptarla como una herramienta que les haga mejorar su
imagen y así puedan vender más. Por ello cada vez vemos más
empresas que dan publicidad a sus envases ecológicos, donaciones a la sociedad
etc.
El objetivo final es que las
empresas acaben siendo responsables, no sólo para cumplir la ley, o para
mejorar su imagen, sino que lo hagan porque es lo correcto. De esta manera, debemos
distinguir tres niveles hacia una responsabilidad social completa