2.2. LA EVOLUCIÓN DEL EMPRESARIO
Vídeo explicativo. La evolución del empresario.
Ahora por qué es tan importante la actividad empresarial y el emprendimiento
Con el nacimiento de las
empresas, el empresario era aquel que invertía su capital y dirigía todo el
proceso productivo. En esta definición, el empresario y el dueño de la empresa
eran la misma persona.
Pero a medida que las empresas se
hacían más grandes, se complica que pueda
haber un solo propietario que aporte todo el capital y que además dirija la
empresa. Por ello, se ha producido una separación entre propiedad y dirección
de la empresa. Todo esto afecta a la manera en la que vemos la figura del
empresario. Veamos su evolución.
Evolución histórica sobre el empresario
Con el nacimiento de las empresas, el empresario era aquel
que invertía su capital y dirigía todo el proceso productivo. En esta
definición, el empresario y el dueño de la empresa eran la misma persona.
Pero a medida que las empresas se hacían más grandes (como
vimos en el anterior apartado), se complica que pueda haber un solo propietario
que aporte todo el capital y que además dirija la empresa. Por ello, se ha
producido una separación entre propiedad y dirección de la empresa. Todo esto
afecta a la manera en la que vemos la figura del empresario. Veamos su
evolución.
- El empresario
mercader (Siglo XVI- XVIII). Durante mercantilismo, el empresario es
básicamente un mercader, es decir una persona que se dedica al comercio. Se
encargaban de comprar los productos a los artesanos para luego venderlos.
Aparece así la figura del primer empresario como un comerciante que gestiona
y controla sus negocios.
- El empresario
capitalista. (Siglo XVIII). Para los economistas clásicos (Adam Smith,
David Ricardo y John Stuart Mill), el empresario era propietario del
negocio, normalmente las grandes fábricas, quién aportaba el dinero y lo
dirigía personalmente. Por tanto, aún no se diferenciaba entre propietario
y directivo.
En esta época, se consideraba que el beneficio que recibía
el empresario era la recompensa por el capital aportado.
- El empresario como
hombre de negocios. (Siglo XVIII-XIX). Para Cantillón los empresarios
son hombres de negocios. Cantillón fue el primero en utilizar el término “empresario”,
como aquel agente compra los factores de producción y luego vende sus productos
a un precio incierto, es decir, asume riesgos.
- El empresario
organizador. (siglo XIX). Sería Marshall el primero que empezaría a
diferenciar al empresario como aquel que dirige y organiza. Por tanto,
es el primero que deja la puerta abierta a que el empresario puede no
aportar capital, y no ser propietario.
Pero, además, Marshall haría una aportación fundamental: el
empresario es el cuarto factor productivo, y la capacidad de producción ya no
sólo dependería de los otros tres factores (tierra, capital y trabajo) sino que
las habilidades de coordinación del empresario eran claves.
Para Marshall, el beneficio era la retribución que se
obtenía por esta función de coordinación
– El
empresario-riesgo de Knight. (siglo XX). Según Knight no se puede ser
empresario sin asumir riesgos. La razón es que el empresario tiene que pagar
los factores productivos para poder producir bienes y servicios (pago de
salarios, de materias primas, de máquinas etc.). Sin embargo, el empresario no
sabe con certeza si podrá vender sus productos, ya que la demanda nunca puede
preverse con exactitud.
Por tanto, el empresario está asumiendo un riesgo, ante
la posibilidad de perder parte o todo su dinero aportado. Así, para Knight,
el beneficio es la recompensa por asumir ese riesgo.
– El empresario innovador
de Schumpeter (siglo XX). Schumpeter consideraba que ser empresario era
ser innovador (algo parecido a lo que hoy entendemos por ser emprendedor), es
decir, inventar un nuevo producto o una nueva forma de producir. Para
Schumpeter, el empresario es el motor del cambio tecnológico y del crecimiento
de la economía, ya que provoca continuas innovaciones que hacen mejorar la
economía.
De esta manera, cuando un empresario genera una innovación,
es el único que produce ese bien, por lo que obtiene un beneficio. Obviamente,
si el producto funciona, será imitado por otros y sus beneficios disminuirán,
por lo que habrá que seguir buscando nuevas innovaciones. Este proceso de
innovación-imitación-innovación fue bautizado por Schumpeter como “Destrucción
creativa”
El beneficio es por tanto la recompensa que percibe el
empresario por su aportación al progreso tecnológico y crecimiento económico.
– El empresario como
tecnoestructura de Galbraith (siglo XX).
Una vez que las empresas son mayores, para poder conseguir el capital
necesitan de muchos accionistas o socios que aporten capital. Es complicado que
todos estos socios se reúnan a menudo y lleguen a acuerdos. Además, para
dirigir una empresa se requieren muchos conocimientos que no tienen los
propietarios.
Por estos motivos, las grandes empresas delegan la dirección
en un conjunto de profesionales que son expertos en sus áreas (economistas,
contables, abogados etc.). Para Galbraith, el empresario es este grupo de
personas expertas de distintas áreas que dirige, y que llamó tecnoestructura,
Además, Galbraith destaca que la división entre
propietarios y directivos lleva a un conflicto en los objetivos empresariales:
los propietarios desean la obtención de
los mayores beneficios posibles, mientras que los directivos, que son los que toman las decisiones, tienen unos objetivos más amplios, como
crecimiento de la empresa, prestigio personal etc.
- El empresario como
descubridor de nuevas oportunidades (siglo XX). Kizner establecía que el empresario
es aquel está buscando continuamente nuevas oportunidades de negocio. De esta
manera, el empresario intenta detectar aquellas necesidades que no están
cubiertas
Por tanto, Kizner destaca la importancia de innovar al igual
que hacía Schumpeter.
En los últimos años,
algunos empresarios como Steve Jobs se han hecho mundialmente famosos por su
capacidad de innovar y crear nuevos productos como el iPhone o iPad. Sin
embargo, para innovar no hace falta ser un genio como Jobs, basta con ver
alguna necesidad no cubierta. Una sencilla plataforma como wallapop o blablacar
se han hecho famosas al permitir a los consumidores ponerse en contacto para
ofrecerse bienes o servicios, una necesidad no cubierta hasta entonces.
– El empresario actual
(siglo XXI).
En la actualidad
el empresario es fundamentalmente un líder que tiene que dirigir y organizar
todos los elementos de la empresa para conseguir unos objetivos. Sin
embargo, debemos distinguir su papel dependiendo de si hablamos de grandes o
pequeñas empresas.
En las grandes
empresas, los propietarios suelen ser una gran cantidad de socios o
accionistas que han aportado un capital y su objetivo es obtener un beneficio. Mientras,
la dirección suele llevarla un equipo de profesionales, normalmente con una
gran formación, y que, con frecuencia, tienen un mayor un mayor poder al de
los propietarios.
Aquí el empresario es un profesional que dirige la empresa, y que arriesga su
prestigio y su puesto de trabajo.
En las pequeñas
empresas, el propietario suele ser también el empresario que se encargar de
dirigir. Estos empresarios suelen tener poca formación profesional y
suelen basar sus decisiones en la experiencia adquirida con los años, aunque
los resultados pueden ser igualmente buenos.
En este caso, el empresario arriesga su capital y dirige
la empresa, por lo que si la empresa va mal pueden perder mucho dinero.
El empresario y sus funciones:
Una vez vista la
evolución histórica, ya estamos en condiciones de conocer todo lo que hace el
empresario
Las 4 principales funciones del empresario son:
planificación, gestión, organización y control.
1. Planificar cuáles son los objetivos que se buscan y las
estrategias y tácticas para conseguirlos
2. Gestionar y dirigir los elementos materiales y humanos de
la empresa para conseguir esos objetivos. Por tanto, implica dar instrucciones
de cómo deben hacerse las cosas.
3. Organizar y coordinar tareas dentro de la empresa. Por
tanto, reparte las responsabilidades de los miembros de la empresa
4. Controlar que todo sale según lo previsto y los objetivos
se están consiguiendo.
Ahora por qué es tan importante la actividad empresarial y el emprendimiento